Dime que música escuchas y te diré quién eres

Cuando miramos al pasado y contemplamos nuestras viejas fotografías, muchas veces nos sorprendemos: un peinado poco favorecedor, ropa de la que hoy nos avergonzamos, una pareja con la que no teníamos nada en común...

Y es que las modas, las personas y todas las circunstancias que les rodean, cambian con el paso de los años. Pocas cosas permanecen fijas.

Una de las cosas que probablemente muchos de nosotros conservamos a lo largo del tiempo son los gustos musicales que desarrollamos durante la adolescencia.

El gusto musical es algo que puede ir ampliando su abanico de opciones a fuerza de aprendizaje, de exponerse a nuevos géneros. Quizás a los 15 años no supiéramos apreciar el Jazz o la Ópera, pero todos recordamos cuales de nuestros amigos de entonces eran "heavies" y, si tenemos la suerte de conservar a esos mismos amigos muchos años después, es bastante probable que sigan escuchando a Metallica, AC/DC o a Rosendo.

La explicación podríamos encontrarla en numerosos estudios que relacionan la personalidad del individuo con sus gustos musicales. Y es que aunque los primeros rasgos de la personalidad se empiezan a manifestar durante los primeros años de vida, es durante la adolescencia cuando comienzan a cristalizarse y afianzarse. Este proceso de cambios y las experiencias vividas durante esta etapa serán el camino que llevará hacia la madurez de su vida como adulto y al desarrollo de su personalidad.

Un grupo de psicólogos de la Universidad de Cambridge, Reino Unido, ha elaborado un estudio que analiza la relación entre la forma de pensar de cada individuo y sus gustos musicales.

Los resultados determinan que las personas con un alto grado de empatía prefieren estilos suaves como el blues, el jazz y el country. En cambio, las personas que se identifiquen con la sistematización, y que piensan de una manera más metódica, se decantarán por estilos más contundentes como el heavy metal o el punk.

En otro estudio llevado a cabo por Samuel Gosling y Peter Rentfrow, de la Universidad de Texas, se distinguen 4 categorías de personas según sus preferencias musicales:

• Música clásica, blues, jazz y soul: se caracterizan por su solidez emocional y, tal como afirmaban los investigadores de Cambridge, suelen ser tolerantes y abiertos de mente.
• Country y pop: son individuos más conservadores y extrovertidos. Tienen una gran vida social y disfrutan en los eventos llenos de gente. A pesar de ello no obtienen grandes puntuaciones en las habilidades verbales.
• Rock y heavy metal: se identifican con la rebeldía y la impulsividad que los hace destacar siempre allá donde van. Tienen un estilo muy marcado y personal y confían firmemente en su inteligencia.
• Soul, funk, hip-hop y música electrónica: abiertos, liberales y puede que algo despistados. Les interesa el deporte y son tolerantes con los fallos de los demás.

Los académicos Adrian North y David Hargreaves han impulsado también varias investigaciones dentro de la Universidad de Heriot-Watt de Edimburgo y de la Universidad de Leicester. De sus diferentes estudios se desprenden los siguientes datos:

• Los amantes del Blues, Jazz y Soul tienen alta autoestima, son creativos, amables y extravertidos.
• Obtienen resultados parecidos a los anteriores los que prefieren el Rap y la Opera.
• Los que se decantan por la música clásica tienen también alta autoestima, son creativos y amables, pero en este caso, son más introvertidos.
• Los amantes del Country son trabajadores y extrovertidos.
• Los fans del Reggae fueron clasificados como individuos creativos, amables, extrovertidos y con alta autoestima. Por contra pueden sucumbir más fácilmente a la pereza.
• Los que disfrutan de la música Dance son creativos y extrovertidos, aunque no obtienen calificaciones altas en amabilidad.
• Los locos de la música Indie presentan una menor autoestima y sus puntuaciones no destacan en amabilidad y dedicación en el trabajo, aunque son muy creativos.
• Los seguidores de la música Rock y Heavy Metal son creativos, introvertidos y amables, pero obtienen puntuaciones bajas en cuanto a autoestima y dedicación en el trabajo.

Estos datos no hay que tomarlos de una manera absoluta, ya que muchas personas pueden manifestar preferencias por distintos géneros musicales. 

Conviene también recordar que estos datos fueron obtenidos cruzando datos a partir de test de personalidad y preferencias musicales, y solo indican tendencias estadísticamente significativas; correlaciones. Obviamente, esto no significa que el hecho de escuchar ciertos estilos musicales "transforme" nuestra personalidad, pero quizás te ayude a comprobar que la persona que eras a los 20 años y la que eres ahora, no son tan distintas como pensabas.