Existe un campo de la informática que había experimentado un gran auge mediático a principios de los años 90 y que luego pareció esfumarse entre todas las nuevas tecnologías que habían comenzado a aparecer. Estas tecnologías se las conoce genéricamente como Realidad Virtual y consisten en crear experiencias en donde las personas se encuentran inmersas dentro de ambientes visuales simulados y desde los cuales pueden interactuar con su entorno.
La idea era muy poderosa y más aún si se la orientaba a sectores como el del entretenimiento y la educación, pero a pesar de eso nunca se llegaron a resolver los problemas que habían comenzado a surgir y que lastraron su desarrollo. Al dejar atrás las presentaciones mediáticas, muchas tecnologías que pueden parecer revolucionarias, caen en el olvido al comprobarse que carecen de aplicación práctica en el mundo real.
Los problemas que la realidad virtual tuvo en aquellas épocas se podrían resumir en los siguientes puntos
La Realidad Virtual por lo tanto quedó de lado y solamente siguió utilizándose en entornos académicos muy específicos y en ciertos campos de la investigación y la ingeniería.
Comenzando una Nueva Era
A veces, el problema de las ideas revolucionarias que caen en el olvido tiene que ver con que aparecen en el momento incorrecto, y la Realidad Virtual es un ejemplo de ello.
En el año 2012 un entusiasta investigador llamado Palmer Luckey presentó al mundo el primer dispositivo de realidad virtual que realmente funcionaba. Llamó a su invento Oculus Rift y fundó la empresa Oculus VR que actualmente fabrica estos aparatos. Desde aquella presentación hasta ahora, todas las grandes compañías de tecnología se han vuelto a interesar en crear dispositivos de todo tipo con la idea de introducir a los usuarios dentro de una realidad simulada en alguna medida.
La realidad virtual es un conjunto de tecnologías que en los últimos años está viviendo una revolución. Tanto desarrollo ha llevado a crear tipos de experiencias en las que se ha empezado a combinar la realidad con la simulación. Esto mismo ha creado una clasificación de realidades virtuales que se basan sobre el grado de realidad que hay dentro de la experiencia virtual. La clasificación por lo tanto es la siguiente:
De cara a los dispositivos utilizados, se pueden clasificar de la siguiente manera:
Poniéndonos Manos a la Obra
Desde Davinchi hemos decidido apostar por esta nueva tecnología e investigar sus posibilidades. Por esta razón desde hace no mucho tiempo hemos comenzado a experimentar con la combinación de la realidad virtual y la detección de movimiento. Esto posibilitaría que las personas pudieran estar dentro de ambientes simulados que al mismo tiempo reaccionarían a los movimientos de las manos y brazos de los usuarios.
Realizando pruebas de simulación con detección de movimiento de manos
Creemos firmemente en las potenciales aplicaciones que todo esto podrá tener para la formación en los próximos meses y desde este blog os invitamos a acompañarnos en las próximas fases de nuestros desarrollos.
Y como siempre, si cree que esta tecnología podría ayudarle en su negocio, o le gustaría saber más, no dude en contactarnos. La realidad virtual ha vuelto para quedarse y su campo de aplicaciones es infinito.
¡Hasta el próximo post!