Quizá es un término del que no hayas oído hablar, pero no es más que una imagen ficticia o cliente potencial de nuestra empresa.
En anteriores post hemos hablado del Inbound Marketing, y esta figura es muy importante porque es una especie de retrato robot que combina algunas variables sociodemográficas con otras de tipo conductual o psicológico. Ayuda a definir la audiencia a la que queremos atraer, pero sobre todo conocer y enteder a nuestro público objetivo. Es fundamental para crear contenido de interés en nuestras acciones de marketing y por supuesto en la mejora del diseño de nuestros productos.
El objetico del buyer persona es identificar a nuestro cliente ideal, para a partir de ahí, diseñar nuestras acciones de marketing, captarlo y retenerlo. Necesitamos diseñar previamente el perfil.
El perfil del buyer persona será la descripción de nuestro cliente con datos como su posición, edad, sexo, localización geográfica, estado civil, profesión, o educación. Debemos establecer criterios y tener en cuenta el poder adquisitivo y su capacidad de consumir el producto o su residencia.
Otros datos que debemos conocer es su comportamiento y averiguar cómo son las personas que quisieran adquirir nuestro producto. Podemos añalizar, por ejemplo, como navega en nuestra web (tiempo transcurrido, palabras claves utilizadas, secciones o productos visitados) o fuentes de información que consulta,
Los aspectos psicológicos nos dan indicadores en cuanto a sus preocupaciones, necesidades, retos o problemas.
El buyer persona podría definirse como la suma del target y una serie de informaciones relacionasdas con los aspectos más personales de nuestro cliente ideal.
Definir previamente el buyer persona es la base de una buena y efectiva planificación de una campaña de marketing. Nos ayuda a:
Una vez tengamos una imagen de nuestro buyer persona canalizaremos todas nuestras acciones sabiendo que personas tendrán a su alcance el producto o servicio y que necesidades quedarían resultas.