La clave de la transformación digital: las personas

Hace unos días retwiteamos esta imagen (@finsi):

Esto generó un pequeño debate con un usuario que nos decía que "en su opinión se necesitaban más Hard Skills en esa lista". Como Twitter no te da más de que 140 caracteres para explicarte, aprovechamos este post para exponer con más detalle nuestra postura al respecto.

Evidentemente, estamos de acuerdo en que la Transformación Digital tiene una base importante en las nuevas tecnologías y la optimización de su utilización. Estaríamos tirando piedras sobre nuestro propio tejado si no lo creyéramos. Desde Davinchi nos esforzamos en proporcionar a las empresas herramientas tecnológicas para mejorar sus procesos. Creemos también en la importancia de la innovación y por eso apostamos por incluir metodologías novedosas en la formación, como la Realidad Virtual.

Pero lo que pretendíamos poner de relieve es que la Transformación Digital no puede limitarse a la introducción de la tecnología. Queríamos resaltar que a pesar de los avances de la inteligencia artificial, el ser humano sigue siendo la pieza clave para el éxito de este proceso. El cambio cultural que implica la Transformación Digital es tan profundo que sin un liderazgo apropiado y una adecuada gestión del cambio el proceso está abocado al fracaso.

La tecnología forma parte de nuestras vidas diarias. Nos guste o no, ni podemos prescindir de ella ni negar su influencia en nuestros hábitos. Y mucho menos ignorarla u obviarla. Corre por ahí una frase muy clarificadora que dice: "Los profesores no serán reemplazados por la tecnología, pero los profesores que no usen la tecnología serán reemplazados por aquellos que sí lo hagan". No queda otra, hay que adaptarse a los tiempos.

Las empresas tampoco pueden competir en el mercado actual si no incorporan en sus procesos todo lo que la tecnología aporta. La gestión, la producción, la comunicación, la relación con el cliente... Cualquier aspecto a día de hoy debe incluir las nuevas tecnologías. Pero no se trata de hacer lo mismo que hacíamos, como lo hacíamos, pero simplemente incluyendo internet como variable. Es un cambio de visión y, por tanto, hay que garantizar que se aporta un valor añadido.

Y esto nos lleva al gráfico que publicamos, el que se presentan los 4 aspectos de la transformación digital que nos llevan a los resultados esperados:

• Un liderazgo que no sólo apoye este cambio y lo asuma desde las primeras fases, sino que también esté ahí en todo momento para impulsar, facilitar y ayudar a la transformación.
• Un cambio en la cultura de la empresa, en la que se deje de escuchar esa famosa frase de "siempre lo hemos hecho así". Puede que entonces funcionara, pero ahora seguro que ya no. O, al menos, no por mucho tiempo.
• Una apuesta por la innovación a todos los niveles. El cambio disruptivo es lo que va a permitir el éxito.
• Un cambio en los roles y habilidades, así como en las relaciones y comunicaciones entre los distintos actores. Como hemos dicho, ahora esa capacidad para sacar partido a la tecnología será lo que aporte el valor diferencial de un profesional, sea cual sea su labor y ámbito de trabajo. Eso lo deben tener claro tanto los trabajadores que tendrán que mantener una actitud de constante aprendizaje y reciclaje, como las personas que buscan el talento para incorporar, que tienen que focalizarse no sólo en las competencias actuales sino también en esa actitud y en el "learnability" o capacidad para aprender cosas nuevas.