Es obvio que todos nosotros a estas alturas tenemos una idea más o menos clara de lo que es un blog, bitácora o sitio web de actualización periódica. Sólo hace falta que recuesdes los 415 que te hemos enviado hasta la fecha.
En los últimos años, lo que comenzó siendo una herramienta de carácter meramente personal, donde algunos “pioneros” volcaban sus opiniones, valoraciones, propuestas sobre los temas más diversos... se ha ido convirtiendo en una herramienta de comunicación poderosa, con un peso importante en el modo en que las empresas interactúan con sus clientes, actuales o potenciales, llegando incluso a convertirse en muchos casos en un instrumento de marketing y venta.
Normalmente a los blogs se acceden bien tecleando una dirección de Internet o bien el usuario recibe por correo electrónico un boletín con todo o parte de las entradas de la bitácora a la que está subscrito. Al convertirse en una herramienta empresarial su formato se ha diversificado, puesto que las empresas han ido introduciendo cambios y mejoras adaptándolo a sus necesidades y objetivos como herramienta de comunicación interna y/o externa.
Algunas empresas utilizan sus blogs para informar del lanzamiento de productos o servicios, otras simplemente buscan un modo de estar en contacto permanente y directo con sus clientes con el objetivo de recibir retroalimentación sobre temas que consideran de interés para unos y otros.
Por norma general, un blog empresarial no está enfocado para emitir opiniones personales de los redactores, como si es el caso de otros blogs. Debe mantener equidistancia y respeto por todas las ideologías y posicionamientos de sus receptores, tratando temas de intereses para sus lectores pero sin entrar a realizar valoraciones ideológicas. Esto en muchos casos requiere un gran esfuerzo de direccionalidad por parte de los coordinadores del blog, ya que es fundamental que esté redactado desde la amabilidad y centrado en el contenido.