FINSI HUMOR: ¿Se puede ser más positivo?
Ver el lado positivo de las cosas no es fácil, pero el esfuerzo, sin duda, merece la pena.
Unos padres felices tuvieron gemelos. Según empezaron a crecer poco a poco, los padres se dieron cuenta de las diferencias que había entre ambos.
Uno de los ninos era completamente negativo. Su perspectiva era siempre la peor, todo desgracias. No importaba qué ocurriese, el nino siempre se sentía desanimado. Era capaz de encontrar una nube lluviosa en medio de un cielo azul.
El otro muchacho era justo lo contrario. Todo positivismo. No importaba lo que ocurriese, el podía encontrar el lado bueno en el lado más oscuro.
Los padres estaban preocupados porque pensaban que ambos ninos tenían un problema con su forma de enfrentarse a la vida, así que unas Navidades decidieron hacer un experimento con la idea de cambiar la disposición de sus gemelos.
Al nino negativo le trajeron toda clase de regalos maravillosos: una bicicleta nueva, una maqueta de tren, videojuegos y un montón más de estupendos juguetes.
Para el nino positivo sólo había un montón de estiércol.
Cuando llegó la manana de Navidad, llevaron al nino negativo a la habitación con sus regalos. Su respuesta fue la esperada: "La bicicleta se me ensuciará y romperá la primera vez que la monte y los demás juguetes seguro que tampoco me duran nada".
Cuando su otro hijo vio el montó de estiércol, se le iluminó la cara y se tiró a escarbar entre el estiércol como un loco.
"?Qué haces?", le preguntaron los padres.
Él contestó: "!!!Con todo este estiércol, seguro que hay un poni en algún sitio!!!"
Uno de los ninos era completamente negativo. Su perspectiva era siempre la peor, todo desgracias. No importaba qué ocurriese, el nino siempre se sentía desanimado. Era capaz de encontrar una nube lluviosa en medio de un cielo azul.
El otro muchacho era justo lo contrario. Todo positivismo. No importaba lo que ocurriese, el podía encontrar el lado bueno en el lado más oscuro.
Los padres estaban preocupados porque pensaban que ambos ninos tenían un problema con su forma de enfrentarse a la vida, así que unas Navidades decidieron hacer un experimento con la idea de cambiar la disposición de sus gemelos.
Al nino negativo le trajeron toda clase de regalos maravillosos: una bicicleta nueva, una maqueta de tren, videojuegos y un montón más de estupendos juguetes.
Para el nino positivo sólo había un montón de estiércol.
Cuando llegó la manana de Navidad, llevaron al nino negativo a la habitación con sus regalos. Su respuesta fue la esperada: "La bicicleta se me ensuciará y romperá la primera vez que la monte y los demás juguetes seguro que tampoco me duran nada".
Cuando su otro hijo vio el montó de estiércol, se le iluminó la cara y se tiró a escarbar entre el estiércol como un loco.
"?Qué haces?", le preguntaron los padres.
Él contestó: "!!!Con todo este estiércol, seguro que hay un poni en algún sitio!!!"