Esa costumbre de garabatear mientras hablamos por teléfono ha demostrado tener una utilidad mayor de la que imaginamos. Según la investigación realizada por la psicóloga Jackie Andrade, de la Universidad de Plymouth, este acto nos ayuda a concentrarnos.
En el experimento que llevó a cabo se vio que las personas que garabateaban mientras escuchaban una conversación telefónica aburrida eran capaces de recordar un 29% más de detalles que aquellos que solamente escucharon.
Andrade apunta que: "Esto sugiere que en la vida diaria hacer garabatos puede ser un modo de mantener la atención en una tarea aburrida en vez de una distracción innecesaria que debemos evitar". Según ella, el hecho de garabatear nos impide entrar en las ensoñaciones que se suelen producir cuando estamos inmersos en una tarea aburrida. De este modo, podemos focalizar mejor la atención en la tarea principal.
Los resultados de vuestras votaciones (297) a día de hoy son los siguientes, bastante en línea con el análisis precedente.