La tecnología está cada día más presente en nuestras vidas, especialmente en el caso de los adolescentes, que pueden llegar a pasar horas delante de ordenadores, consolas, móviles, etc.
Un estudio de la Universidad de Stanford se ha centrado en averiguar cómo la tecnología afecta a los adolescentes en lo que a su felicidad y desarrollo emocional se refiere.
El estudio se llevó a cabo on-line con chicas de 8 a 12 años. De él se desprende que aquellas que pasan un considerable tiempo usando el ordenador se describen de una forma que sugiere que son menos felices y que se sienten menos cómodas socialmente que sus compañeras que dedican menos tiempo.
Si bien hay que tener precaución a la hora de analizar estos datos ya que el hecho de que el estudio se haya llevado a cabo on-line con una muestra de 3.400 chicas, puede suponer que esta muestra no sea representativa, lo que sí podemos concluir es que las nuevas tecnologías han supuesto un claro cambio en el desarrollo social de los adolescentes.
Parece necesario que las chicas experimenten las bases de la comunicación cara a cara para mejorar sus relaciones sociales y estado de ánimo.
Uno de los comentarios de una chica sobre sus conversaciones a través de las redes sociales lo expresa perfectamente: "Puede que no entiendan cómo me siento porque no pueden ver las emociones en mi cara ni escuchar mi voz".
Aunque los científicos se muestran cautos con las conclusiones extraídas de este estudio debido a sus limitaciones, sí parecen estar de acuerdo en la importancia de que los padres sean conscientes de la necesidad de encontrar momentos para "desconectar" a sus hijos y favorecer el contacto interpersonal directo.