Unos psicólogos decidieron comprobar si tal y como dicen algunos tópicos rechazamos a las personas que percibimos como "perfectas", las que "hacen todo bien".
El experimento consistía en lo siguiente. Tomaron a unas cuantas personas y les dijeron:" Estamos buscando gente para un concurso de televisión de conocimientos, y tenemos aquí la grabación de un candidato. Nos gustaría que la escucharas y nos dijeras qué te parece".
Los sujetos escuchaban la grabación de una persona hablando un poco de sí mismo que respondía a unas cuantas preguntas estilo Trivial Pursuit y se marchaba.
Había en total cuatro grabaciones, pero ninguna de las personas participantes en el experimento oía las cuatro grabaciones, sólo una.Los cuatro personajes eran el realidad un actor profesional que representaba un papel distinto en cada grabación.
Había: un tipo competente, otro competente pero torpe, otro mediocre, y otro mediocre y además torpe.
¿Resultados?
En general preferimos al competente sobre el mediocre, y al hábil sobre el torpe, pero cuando se da todo a la vez, la preferencia se orienta más al competente un poquito torpe. Como detalle curioso los datos mostraron que se prefiere al hombre perfecto sobre el mediocre que no se tira el café encima... pero por una diferencia mínima.
En conclusión este experimento sólo demuestra que hay un cierto rechazo a las personas que percibimos como perfectos, lo interesante ahora sería tratar de averigüar el porque de esta elección.