EL Error de DESCARTES

Richard S. Lazarus afirmaba:

"Las emociones son producto de un significado personal que depende de aquello que para nosotros es importante y de las cosas que creemos sobre nosotros mismos y el mundo en general. Es el significado que le damos a los acontecimientos y a las condiciones de nuestras vidas lo que nos hace sentir enfadados, ansiosos, culpables, felices, orgullosos y así sucesivamente. Comprender las emociones propias o ajenas, es comprender las manera en que las personas interpretan la importancia de los acontecimientos cotidianos en sus vidas y cómo estos acontecimientos afectan a su bienestar personal".

Cada sociedad, cada cultura y cada momento histórico tiene sus propias creencias. Nuestra identidad se construye a partir de esas creencias. Por tanto, lo social y lo personal acaban siendo una interacción indisoluble de la que nacen y se hacen nuestras creencias en el día a día.

Cada uno de nosotros  le damos vueltas a las cosas que nos suceden hasta que encajan con nuestras realidades, y se ajustan a nuestros convencimientos. Lo que se traduce en algo tan simple como: "vemos lo que queremos ver".  Es como si nos colocásemos una gafas que nos permiten ver solamente aquella información que encaja en nuestros mapas de pensamiento, ignorando el resto. Esto, sin duda tiene una gran trascendencia en nuestra relación con el mundo que nos rodea y con el resto de personas.

Esa sensación de "cómo no es posible que estemos hablando del mismo hecho o acontecimiento", se produce porque las personas usamos mapas diferentes para ver y valorar. Esto, provoca muchos de los problemas de relación que tenemos con los demás. Es decir, estamos realmente viendo cosas diferentes, aunque nos resulte increíble pensar así.

Para resumir, nuestras creencias no son certezas, son sólo, presunciones sobre el mundo, disenadas por nosotros a nuestra imagen y semejanza. Todos deberíamos reflexionar a cerca de la siguiente idea implícita en muchos de nuestros comportamientos: "las cosas son como yo creo que son, en consecuencia, esa es la verdad".