En este libro se utiliza el símil de la tortuga para hacernos pensar sobre el estilo de vida actual. Slow es una tendencia cultural que apuesta por potenciar la desaceleración y la calma. No habla de la lentitud inapropiada, sino de dar a cada cosa su debido tiempo.
En definitiva este libro nos hace comprender que correr no es sinónimo de hacer muchas cosas y mucho menos de hacerlas bien.
El libro analiza algunos de los clásicos síntomas de la cultura del movimiento y la rapidez, como son el estrés, el burn-out, narcisismo, etc y nos propone, no el actuar demasiado lento sino actuar con sentido. Sacar el sabor de las cosas.
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