Recientemente hemos oído en las noticias que por primera vez un ordenador ha superado el test de Turing.
Este test fue desarrollado por Alan Turing y publicado en la revista Mind, en 1950, por primera vez. Se trata de una prueba para evaluar si una máquina posee la suficiente inteligencia como para hacerse pasar por un ser humano. La creencia de Turing era que en algún momento las máquinas llegarían a ser tan inteligentes como las personas y capaces de pensar como nosotros.
Para ello, las personas que ejercerán de jueces se sitúan en una habitación y en otras dos diferentes, una máquina y un humano. Para descubrir quién es quién, el juez realiza preguntas que ambos (persona y máquina) deben contestar por escrito. Si después de cinco minutos, el 30% de los jueces no han sido capaces de distinguir quién es el humano y quién la máquina, se considera que el test de Turing ha sido superado.
Eugene Goostman, un programa desarrollado por informáticos ucranianos, que simula ser un chico de 13 años, ha conseguido por primera vez engañar al 33% de los jueces. Dado que ha superado el 30% establecido por Turing, se puede decir que este "adolescente ucraniano" ha sido capaz de superar las preguntas realizadas por La Royal Society de Londres y hacerles creer que estaban conversando con una persona de carne y hueso.