La envidia se define como la sensación de admiración o deseo por tener algo que otro posee, y el rencor o resentimiento al ver el éxito del otro.
Ambicionar, anhelar, ansiar, apetecer, codiciar, desear, querer, incitar, resentirse, disgustarse, consumirse, rivalizar, estas son algunas de las formas en las que nos referimos a la envidia.
La palabra envidia procede del vocablo latino 'invidere', que significa "mirar con malos ojos". La envidia se define como la sensación de admiración o deseo por tener algo que otro posee, y el rencor o resentimiento al ver el éxito del otro.
Tal vez uno de los sentimientos que más lastran al ser humano es el de la envidia. Envidiar no sólo lo que el otro tiene, sino lo que el otro es, lo que el otro representa, cómo el otro actúa, cómo se relaciona , como vive, como le tratan, como le respetan, como le admiran, cómo triunfa, etc.
Vivir mirando hacia fuera, en lugar de hacia dentro es una garantía de infelicidad y frustración constante. Hay quien mira y admira, pero hay quien mira y no sólo envidia sino que hasta odia.
Pero la envidia no es sólo un sentimiento que provoca una gran desdicha en quien la padece, sino también en quien es objeto de ella, que se ve en muchos casos diana de todo un conjunto de comportamientos envenenados, de los que no es en absoluto responsable.
Muchas personas que viven con el ansia permanente de destacar, ser el centro de atención, ganar, o estar por encima de los demás. Esta actitud lleva inevitablemente a un sentimiento de continua amenaza y competencia con todos.
La envidia se manifiesta a través de la crítica, el cuestionamiento, la difamación, la descalificación o en muchos casos el comentario mordaz.
La envidia, como muchos otros comportamientos, tiene un componente de aprendizaje importante. Si en nuestro entorno hemos convivido con la envidia como sentimiento expresado por parte de los que nos rodeaban o rodean, es bastante probable que acabemos incorporándola a nuestro propio comportamiento.
La envidia es un sentimiento que se oculta, se esconde y se niega, nos avergüenza reconocer que sentimos envidia. Ha sido considerada como uno de los siete pecados capitales.
Algunos dicen:"siento envidia sana". Si hacemos una distinción entre envidia sana y destructiva, podríamos decir que la primera estaría relacionada con la admiración y el anhelo de alcanzar lo que otro es o tiene. La envidia destructiva no solo busca el conseguir lo que otro tiene o es, sino que tiene un fuerte componente de deseo de pérdida hacia el otro. Se desea con más intensidad que el objeto de la envidia deje de poseer, que el tener uno mismo.
Muchos estudios y trabajos relacionan la envidia con baja autoestima, sentimientos de inferioridad, complejos, inseguridad, que actúan detectando en los demás aquello de lo que carecemos física, emocional o económicamente.
La envidia es un sentimiento distinto a los celos. La envidia se relaciona con el deseo de desposeer al otro de lo que es o tiene, los celos están relacionados con el sentimiento de posesión y control del otro.
Las recomendaciones que nos dan los expertos para minimizar o afrontar los posibles sentimientos de envidia son:
Estas recomendaciones aunque simples, pueden ayudarnos a soltar el lastre de la envidia, tanto si somos nosotros los que la sentimos, como si somos objeto de ella.
El miedo al error es un lastre emocional que hay que aprender a soltar.
La ansiedad en una de las emociones más ampliamente estudiadas. Existen distintos tipos de ansiedad, entre ellos la ansiedad a hablar en público.
El miedo es una respuesta adaptativa que ha permitido preservar la especie. Sin embargo, el miedo irracional es altamente incapacitante.
Arthur Schopenhauer dijo: "La riqueza material es como el agua salada, cuanto más se bebe, más sed da".
La relación entre procesos mentales y orgánicos es una cuestión presente no sólo en los orígenes de la psicología, sino también en la medicina.
La envidia se define como la sensación de admiración o deseo por tener algo que otro posee, y el rencor o resentimiento al ver el éxito del otro.
Es un sentimiento en el cual una persona se siente de menor valor frente a los demás.
Leía este fin de semana:"La naturaleza nos dota de ilimitadas posibilidades, pero solamente realizamos aquellas para las que nos juzgamos capaces."
Muchos han dicho que el suicidio es un ejercicio de libertad, los expertos coinciden en considerarlo un problema de sufrimiento intenso.
Las emociones están con nosotros desde hace millones de años, antes incluso de que el homo fuera sapiens.
Las emociones son respuestas automáticas y los sentimientos son la etiqueta de la reacción emocional.