Las emociones son respuestas automáticas y los sentimientos son la etiqueta de la reacción emocional.
Sentimiento y emoción son dos términos que suelen dar lugar a confusión. En muchas ocasiones emoción y sentimiento se utilizan como sinónimos, aunque son conceptos cualitativamente diferentes.
Seguramente esta confusión entre los dos términos venga bastante determinada, porque a lo largo de la Historia la utilización de los diversos términos emocionales no ha sido clara, precisa y delimitada.
Las emociones son un conjunto complejo de respuestas químicas y neuronales que forman un patrón. Son respuestas producidas por el cerebro ante un estímulo.
Los sentimientos, en cambio, surgen de la evaluación consciente que hacemos de la percepción de nuestro estado corporal durante una respuesta emocional. Los sentimientos son conscientes y las emociones son inconscientes, en tanto que son reacciones automáticas ante estímulos. Las emociones son producidas en líneas generales, por estímulos exteriores e interiores (recuerdos, pensamientos, evocaciones). Suelen aparecer de forma súbita, sin esperarlo, bruscamente, manifestándose en la expresión corporal.
En el momento que tomamos conciencia de las sensaciones (alteraciones) de nuestro cuerpo al recibir ese estímulo, la emoción se convierte en sentimiento. Es decir, en el momento que notamos que nuestro organismo sufre una alteración (por ejemplo: mariposas en el estómago,...) y somos conscientes de ello, etiquetamos lo que estamos sintiendo (la emoción), en este caso tendríamos un sentimiento de sorpresa, placer, alegría, satisfacción,...
Algunos estudiosos de las emociones centran la diferenciación entre sentimiento y emoción en la duración de cada uno, la emoción es menos duradera que el sentimiento.
Las emociones por tanto serían un estado de excitación o perturbación más o menos espontánea y que puede durar desde segundos hasta horas. Las emociones son cortas pero el sentimiento es largo. Podríamos decir que un sentimiento es como una cadena y cada uno de los eslabones son las emociones. Las emociones necesitan un acontecimiento disparador, que puede ser interno o externo, si este acontecimiento desaparece, normalmente las emociones que lo acompañan también desaparecen.
Las emociones son específicas y reactivas, son respuestas automáticas. El sentimiento por su parte es un componente subjetivo de las emociones, es la etiqueta que una persona pone a una emoción.
Los sentimientos también tienen una duración que es proporcional al tiempo en que nuestra consciencia piensa en ellos. Podemos sentir tristeza, pero sólo cuando nuestra mente se enfoca en un tema triste, podemos sentir miedo, pero sólo cuando nos vemos amenazados, cuando dejamos de poner consciencia en algo el sentimiento desaparece. Es por ello que algunas técnicas para el control de pensamiento en distintas situaciones, por ejemplo estrés, ansiedad radican en enfocar nuestro pensamiento a estímulos diferentes para provocar sentimientos distintos.
Uno de los grandes estudiosos de las emociones Richard. S. Lazarus, (1991), considera sentimiento y emoción como conceptos interrelacionados, donde la emoción englobaría al de sentimiento en tanto que el sentimiento sería el componente subjetivo o cognitivo de las emociones, es decir, la etiqueta que la persona pone a la emoción.
Otro concepto que también podemos incluir próximo al de emoción y sentimiento, es el estado de ánimo. Los estados de ánimo no son emociones, sino estados psicológicos más o menos duraderos, y desde los que valoramos e interpretamos los acontecimientos.
Son sentimientos la alegría, la felicidad, el enfado, la preocupación, etc, y son estados de ánimo, la euforia, la depresión, la ansiedad, la angustia, la desidia, etc.
El miedo al error es un lastre emocional que hay que aprender a soltar.
La ansiedad en una de las emociones más ampliamente estudiadas. Existen distintos tipos de ansiedad, entre ellos la ansiedad a hablar en público.
El miedo es una respuesta adaptativa que ha permitido preservar la especie. Sin embargo, el miedo irracional es altamente incapacitante.
Arthur Schopenhauer dijo: "La riqueza material es como el agua salada, cuanto más se bebe, más sed da".
La relación entre procesos mentales y orgánicos es una cuestión presente no sólo en los orígenes de la psicología, sino también en la medicina.
La envidia se define como la sensación de admiración o deseo por tener algo que otro posee, y el rencor o resentimiento al ver el éxito del otro.
Es un sentimiento en el cual una persona se siente de menor valor frente a los demás.
Leía este fin de semana:"La naturaleza nos dota de ilimitadas posibilidades, pero solamente realizamos aquellas para las que nos juzgamos capaces."
Muchos han dicho que el suicidio es un ejercicio de libertad, los expertos coinciden en considerarlo un problema de sufrimiento intenso.
Las emociones están con nosotros desde hace millones de años, antes incluso de que el homo fuera sapiens.
Las emociones son respuestas automáticas y los sentimientos son la etiqueta de la reacción emocional.