"Si algo es o puede ser peligroso o temible, se deberá sentir terriblemente inquieto por ello y deberá pensar constantemente en la posibilidad de que esto ocurra".
Una vez sabida la noticia del terremoto, el tsunami y la amenaza nuclear, Juan estaba muy alterado, buscaba obsesivamente información, y, en general, mostraba todo un repertorio de conductas que mostraban su terrible inquietud ante lo que podría ocurrir a su hijo que residía en Japón.
El entendía que este debía ser el modo como hay que actuar ante estos hechos. Discutía con su esposa, "¡No entiendo cómo puedes estar tan tranquila! Es que parece que no te preocupa."
Juan, al igual que muchas otras personas, sienten que ante un hecho temible o peligroso hay que estar constantemente inquieto y preocupado. Es más, lo contrario puede parece que existe un desinterés por nuestra parte, o que no nos importa.
Ante un hecho concreto podemos tomar ciertas medidas que están de nuestra mano. Otras muchas no lo están. Y por mucho que nos preocupemos, no vamos a ayudar. Es más, en el mejor de los casos podemos generar el pánico colectivo en las personas de alrededor.
Por otra parte, cuando tenemos una sobrepreocupación, la propia ansiedad impide ver realmente la gravedad del asunto, nos impide afrontar el problema con eficacia y tendemos a aumentar las consecuencias negativas y la probabilidad que ocurra.
Como todas las ideas irracionales, parece dificil situarse en un punto intermedio entre "Esto es serio" y el "No pasa nada". Pero al menos deberemos tener en cuenta que el malestar y miedo nos lo generamos a nosotros mismos al pasar por nuestro filtro la situación de peligro.
Haz una lista de las situaciones actuales que resulten un peligro (enfermedad, posibilidad de pérdida de trabajo, etc.). A continuación evalúa si la preocupación que tienes es constante e intensa. Por último plantéate cómo puede afectar dicha preocupación en la probabilidad de cambiar el suceso. Y por último contempla otra manera de afrontarlo racionalmente disminuyendo la ansiedad, el tiempo de atención al problema y la intensidad.
Comenzamos una serie de post que nos ayudarán a enfrentarnos con aquellas ideas irracionales de las que no somos conscientes y que causan nuestras emociones, casi siempre negativas.
Listado de las 11 creencias irracionales de Ellis.
"Es una necesidad extrema para el ser humano adulto el ser amado y aprobado por prácticamente cada persona significativa de la sociedad."
"Para considerarse uno mismo valioso se debe ser muy competente, suficiente y capaz de lograr cualquier cosa en todos los aspectos posibles".
"Cierta clase de gente es vil, malvada e infame y que deben ser seriamente culpabilizados y castigados por su maldad".
"Es tremendo y catastrófico el hecho de que las cosas no vayan por el camino que a uno le gustaría que fuesen".
"La desgracia humana se origina por causas externas y la gente tiene poca capacidad o ninguna, de controlar sus penas y perturbaciones".
"Si algo es o puede ser peligroso o temible, se deberá sentir terriblemente inquieto por ello y deberá pensar constantemente en la posibilidad de que esto ocurra".
"Es más fácil evitar que afrontar ciertas responsabilidades y dificultades en la vida".
"Se debe depender de los demás y se necesita a alguien más fuerte en quien confiar".
"La historia pasada de uno es un determinante decisivo de la conducta actual, y que algo que le ocurrió alguna vez y le conmocionó debe seguir afectándole indefinidamente"
"Uno deberá sentirse muy preocupado por los problemas y las perturbaciones de los demás".
"Invariablemente existe una solución precisa, correcta y perfecta para los problemas humanos, y que si esta solución perfecta no se encuentra sobreviene la catástrofe".